sábado, 12 de junio de 2010

EL COCHE ELÉCTRICO HA MUERTO. VIVA EL COCHE ELÉCTRICO!!!

Hace un tiempo escribí algo sobre coches eléctricos, centrado en unas inversiones previstas por el gobierno en aquel momento, y unas previsiones de ventas y uso, que para mí, son erróneas.
El otro día, en el programa de televisión Top Gear (me encanta ése programa), hicieron un reportaje que ilustra perfectamente por qué todas esas previsiones son erróneas, y por qué el coche eléctrico (tal y como nos lo están vendiendo), ha nacido muerto.



Y es que las previsiones de aquel momento son erróneas porque el coche eléctrico, tal y como lo conocemos, y tal y como se está vendiendo, pretende cambiar radicalmente nuestro modo de vida, construido en torno al automóvil tal y como lo conocemos actualmente, y pienso que a la gente éso no le gusta.
Como dicen en el reportaje, conducimos unos kilómetros, repostamos, y conducimos un poco más... no queremos depender de baterías que se cargan en ocho horas, que permiten muy poca autonomía, y con coches cuyas prestaciones son ridículas; el hidrógeno permite seguir contando con las misma filosofía de vida automovilística con poco impacto sobre la manera de distribuir la energía fuente.
Estoy de acuerdo con el reportaje; el hidrógeno es el futuro por todas las razones que allí se exponen (no os perdáis el razonamiento de Jay Leno al respecto en un momento del reportaje); pero, más allá de ése debate, me hizo reflexionar sobre los procesos innovadores.
Y es que en nuestras empresas y mercados, no se puede realizar cambios innovadores en productos, procesos o en organización, que impliquen un cambio de los "modos de vida" de los clientes, empleados, o stakeholders en general tal y como lo conocen, sino, basándonos en aquellos modos de vida, tratar de mejorarlos, porque la innovación implica facilitar las acciones que se desarrollan actualmente, no hacerlas más complejas, o no?, o, vosotros qué pensáis?

Espero vuestros comentarios,
Saludos,
Pepe Moral Moreno

viernes, 4 de junio de 2010

ZEN EN EL AEROPUERTO

Hace unos días he terminado de leer "Eres imprescindible", de Seth Godin. Qué queréis que os diga... la verdad es que realmente no aporta nada nuevo; pero sí que es cierto que los libros de Godin tienen algo especial, y es que cuando piensas que te vas a empezar a saltar los párrafos de dos en dos, siempre cuenta una anécdota por la que vale la pena haber empezado a leerlo. 
Os transcribo Zen en el aeropuerto.

En un mostrador del aeropuerto a pleno rendimiento se puede aprender mucho, en especial si hay una tormenta de nieve. [...] Hace cuartenta años, Richard Branson, que acabaría fundando Virgin Air, se encontró en una situación parecida en un aeropuerto de Caribe. Acababan de cancelar su vuelo, el único del día. En vez de ponerse histérico sobre lo importantísimo que era para él el vuelo, sobre lo mucho que le habían arruinado el día, sobre los perjuicios que le ocasionaban a su carrera, el joven Branson se dirigió al mostrador de vuelos chárter y se enteró cuánto costaba fletar un vuelo desde Puerto Rico.
Luego, tomó prestada una pizarra portátil y escribió: "Vuelo a las Islas Vírgenes, 39 dólares". Volvió a su puerta, vendió los billetes suficientes entre los otros pasajeros para cubrir totalmente sus costes... y llegó a su destino a tiempo. Por no hablar de que acababa de poner las semillas de la línea aérea que fundaría al cabo de unos años. Suena al tipo de persona que te gustaría contratar.

Y es que me parece un grandísimo ejemplo con muchas lecturas:
- La vida no va contra nosotros, y siempre existen salidas imaginativas a cualquier entuerto.
- Somos más capaces de lo que creemos de resolver situaciones incómodas.
- El primer paso es aceptar que no vas a volar... cuanto antes aceptes los hechos, antes podrás comenzar a buscar alternativas y soluciones.
- En muchas ocasiones, la solución está en la colaboración; en éste caso, con otros pasajeros; en otros, con clientes, proveedores, colaboradores, etc. Hay que perder definitivamente el miedo a buscar ayuda, y a colaborar.

Creo que la anécdota bien merecía un post, o no?, o, vosotros qué pensáis?

Saludos,
Pepe Moral